¿Cómo mantener tu rutina de salud mientras viajas por trabajo o vacaciones?

Viajar es un placer para la mayoría de las personas, incluso cuando se viaja por trabajo. La emoción de hacer las maletas y prepararse para salir de la rutina normal para ir a un lugar diferente es difícil de describir. No importa cuán cerca o lejos, o cuán interesante vaya a ser el lugar, el mero hecho de salir es generalmente positivo. El problema es que, en la mayoría de los casos, significa que prestamos menos atención a nuestra salud mientras estamos fuera de casa. Siga leyendo para encontrar consejos a prueba de balas para mantenerse saludable mientras está fuera de casa.

Planificar, planificar y volver a planificar de nuevo

El primer y más importante consejo para mantener su rutina de salud mientras viaja es la planificación. Si no piensa en el futuro y planifica en consecuencia, hay muy pocas posibilidades de que pueda tomar decisiones conscientes de la salud. Algunas de las cosas que considero personalmente cada vez que me voy son:

• Selección de hoteles: Si tienes la oportunidad, busca un hotel con una habitación fitness. Lo sé, la mayoría de los hoteles tienen uno muy limitado, y puedes pensar que no vale nada, pero es mejor que nada. Y sí, puedes hacer uno de mis entrenamientos de peso corporal en tu habitación, pero seamos realistas, puedes encontrar un millón de excusas en contra. Así que tener una habitación fitness en la planta baja las 24 horas eliminará mentalmente algunas de esas excusas.
• Ubicación del hotel: Investigue el área donde se encuentra el hotel. Encuentre gimnasios y parques cercanos, que puedan satisfacer esa picazón para un mejor entrenamiento que la sala fitness. Encuentre opciones de restaurantes saludables y supermercados o tiendas de conveniencia, donde pueda obtener frutas frescas y otros alimentos que no involucren comidas de hotel terribles. Algunas veces tomará algo de conducción, pero prometo que valdrá la pena.
• Actividades: Plan de actividades activas y conscientes de la salud. Sí, son vacaciones o incluso trabajo, pero eso no te impide hacer cosas que te hacen bien. ¿Yoga en la playa? ¿Recorrido a pie por el centro de la ciudad? ¿Clases de cocina con los lugareños si viajas al extranjero?
• Lista de tareas: Suena muy difícil, pero es importante hacer un plan mental (o incluso escrito) para tus días. Piensa en cuántas cosas quieres lograr ese día, qué lugares tienes que visitar, cuánto tiempo te tomaría llegar allí y cuánto tiempo planeas estar en cada uno. No hace falta que sea muy rígido para que se lleve toda la diversión, pero si te preparas un plan mental, será más fácil programar tus entrenamientos y tus comidas para que no se “olviden”.

Establecer prioridades

Ahora que ha investigado el área y las actividades y tiene un plan mental de lo que quiere hacer, es importante establecer prioridades. Algunas cosas no saldrán según lo planeado y, para ser honesto, parte de la experiencia de viajar significa tener cierta flexibilidad y libertad para improvisar. Por eso en vez de tener un horario fijo es mejor tener una lista de prioridades. Las cosas que querrías lograr, pero también cuáles son más importantes y cuáles serían las primeras en abandonar cuando la vida se complique. Aquí es donde sus entrenamientos, comidas, meditación y otras actividades saludables deben colocarse en la parte superior de la lista.

no te superes a ti mismo

Puede sonar contrario a los dos elementos anteriores, pero al final del día, es mejor no pensar demasiado. Cuando algunos de estos elementos cambien (observe que dije “cuándo”, no “si”), no se castigue. En estos casos, es mejor hacer un “esfuerzo a medias” que no hacer nada. ¿No pudiste hacer tu entrenamiento de 1 hora? Haz 15 minutos en su lugar. ¿No puedes hacer un entrenamiento de gimnasio de levantamiento de pesas pesadas? Haz un HIIT de peso corporal en su lugar. ¿Terminaste comiendo en un restaurante de comida rápida? Asegúrese de tomar una decisión consciente sobre qué pedir. Y si terminas sin hacer nada, bueno, el mundo sigue adelante, lo harás mejor al día siguiente.

Pero ¡advertencia! Esto no es un pase gratis. No juegues la carta del “medio esfuerzo” todos los días, no dejes que tu cerebro te convenza de que está bien. Piense en esto como un pase solo para emergencias. Puedes usarlo cuando realmente lo necesites, pero la mayoría de los casos hacen un esfuerzo por continuar con tu rutina sin importar dónde te encuentres.

Vivir una vida consciente de la salud no toma vacaciones, es parte de uno mismo. Al final del día, ¿dejas de cepillarte los dientes o de vestirte cuando estás de viaje? Lo mismo aplica para tus hábitos saludables, ellos no necesitan quedarse en casa mientras viajas. Si sigues estos 3 sencillos consejos, estarás preparando tu viaje con buen pie y cuando regreses te sentirás feliz y orgulloso de haber podido mantener tu rutina de salud, a pesar de las circunstancias cambiantes.